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La certificación de los protocolos frente al COVID-19 tiene un objetivo claro: ayudar a las organizaciones con una herramienta para provocar un impacto positivo, asegurando a empresas y asociaciones que podrán volver a la normalidad con el mayor nivel de garantía posible.

La crisis sanitaria generada por el COVID-19 ha tenido un elevado impacto en sectores económicos críticos y esenciales, encontrándose gravemente afectadas áreas de actividad en sectores como industria y servicios esenciales, gran distribución y comercio, transporte de personas y logística, banca y seguros, o turismo, por mencionar algunos ejemplos.

Esta situación ha creado incertidumbre en la sociedad respecto a las soluciones aportadas por parte de las empresas de dichos sectores, sobre su capacidad para proporcionar seguridad y confianza en las medidas de actuación planteadas y para ofrecer una vuelta a la normalidad con las suficientes garantías sanitarias.

Solo que esa normalidad se ha denominado ya como “nueva normalidad”, puesto que una vez superado el confinamiento lo que se plantean son nuevos desafíos en la vuelta a la actividad de las empresas:

  • Se requiere mayor seguridad sanitaria y de continuidad de negocio ante la nueva situación. Todos queremos llegar seguros a nuestro puesto de trabajo, en medios de transporte que den garantías de que eso es así.
  • Nuevas formas de relación con los clientes, empleados y socios. Vamos a cambiar las formas de hablar con los clientes, de reunirnos con ellos, de relacionarnos entre nosotros.
  • Cambios internos en la forma de trabajar y operar (teletrabajo, conectividad, etc.). Muchos de nosotros estábamos habituados a las videoconferencias, pero en este tiempo se ha batido todo récord anterior. Se ha cambiado nuestra forma de trabajar, pero desde una perspectiva nueva.

Ante esta situación, las organizaciones necesitan cuanto antes generar confianza a la hora de reactivar su actividad dentro de esta “nueva normalidad” que se nos plantea.

La “nueva normalidad”, orientada hacia un calendario de reinicio de actividad prefijado, va a requerir del desarrollo de protocolos específicos que traten de hacer frente al coronavirus.

Las organizaciones tienen el foco puesto en una eficaz y eficiente aplicación de dichos protocolos y de las medidas contempladas en los mismos para evitar contagios del virus. Pero también en que estas medidas lleguen y den seguridad a sus clientes y a sus trabajadores, generando confianza.

Y para generar esa confianza a clientes, empleados y consumidores, para reforzar las iniciativas desarrolladas en este ámbito y por fidelidad a nuestro propósito, TEMPO CONSULTORES asesora a todas las empresas en relación a los esquemas de certificación basados en la evaluación de la aplicación de los protocolos frente al COVID-19 y les ayuda a la consecución de la certificación correspondiente.

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